Un recorrido visual por la evolución Windows y macOS
La mejor forma de ver cómo ha evolucionado la tecnología es en imágenes. Echar la vista atrás y ver cómo eran las cosas antes y cómo son ahora, permite tener una perspectiva más correcta de toda su evolución. Version Museum hace eso y es una de esas webs que podrías estar mirando durante horas. Porque poder comparar cómo era Windows en su primera y última versión, o el inicio de Mac OS frente a su futuro macOS Catalina es interesante.
Microsoft, 35 años de evolución
En 1985, Microsoft lanzó la primera versión de sus sistema operativo Windows. No era ni por asomo lo que es ahora, pero cómo se usaban ya las ventanas y algunos elementos adicionales resulta curioso. Desde aquel Windows 1.0 hasta la versión 3.0 hubo pocos cambios, y no fue hasta 1995 cuando se produjo uno importante. Windows 95 no sólo fue todo un éxito, también fue el inicio de lo que ahora mismo es el sistema.
Windows 98 fue otra gran versión del sistema, sin embargo, las posteriores todo lo contrario. Windows 2000 y ME pasaron sin pena ni gloria, y muchos usuarios se negaban a instalarlas esperando una futura versión que llegaría con el siguiente gran hito de Redmond: Windows XP.
En 2006 llegó Windows Vista y tres años más tarde Windows 7. El primero, tras un Windows XP que había sido tan bien aceptado, fue un duro golpe para el usuario y, sobre todo, la propia compañía que veía que no era aceptado.
Por suerte, a pesar de lo que mucho que se dijo, Windows 7 y su posterior Windows 8 comenzaron a recuperar la estabilidad y buenas prácticas que han ido evolucionando hasta la actualidad con Windows 10.
Eso sí, el salto al menú de baldosas de Windows 8 fue difícil de asimilar. Es más, aún hay quien no lo ha logrado. Por suerte se puede cambiar a una vista más “clásica”.
Windows 10 es en la actualidad un gran sistema operativo, estable y seguro. Por supuesto, si eres usuario de Mac o Linux te costará adaptarte, al igual que al usuario de Windows cambiar de plataforma. Pero hay que dejar los falsos mitos acerca de la superioridad de uno frente al otro, todas son grandes opciones.
Como puedes ver, la evolución a nivel gráfico es más que notable, pero la estructura apenas se ha modificado. Si quieres ver más imágenes, en este enlace tienes más capturas.
De Mac OS System a macOS Catalina
Hablar de Apple y su sistema operativo de escritorio es hacerlo de dos épocas: Mac OS System y Mac OS X. En la primera, con Mac OS System, Apple logró revolucionar la industria de la informática personal. Un interfaz gráfico, con muchos iconos y donde el uso de tipografías diferentes marcaron un antes y un después.
Aún así, no siempre fue un sistema operativo perfecto. En estas versiones de Mac OS System la multitarea no estaba implementada. Cuando cambiabas de aplicación, la anterior se bloqueaba hasta volvías a ella. Aunque lo más llamativo es que, por mucho que dijeran que los Mac no se colgaban, de vez en cuando te encontrabas con algún bloqueo y el ya clásico y hasta entrañable icono de la bomba.
Con Mac OS System 7 llegó el color, y eso fue toda una gran noticia. Las dos siguientes versiones fueron más continuistas y Apple necesitaba desprenderse de lo que estaba lastrando la evolución de su plataforma.
Por ese motivo o gracias a eso, regreso Steve Jobs y llegó Mac OS X. La nueva versión del sistema operativo fue un antes y un después, estaba basado en el trabajo de NeXt y por fin había una base sólida para construir lo que sería su sistema operativo del futuro.
Desde aquella primera versión, conocida como Cheetah, hasta la recién presentada macOS Catalina, la evolución ha sido notable a nivel tecnologías. Pero el núcleo es el mismo, la forma de gestionar las ventanas, contenido… sigue siendo igual.
Por cierto, Finder es una de esas partes de macOS odiada por algunos debido a sus “limitaciones” y amada por otros por cómo de sencillo resulta, una vez te adaptas, manejar todo el sistema de archivos y carpetas.
De entre todas las versiones de la nueva etapa destacaron algunas como Mac OS X Snow Leopard. El salto en estabilidad y rendimiento que ofreció hizo que, durante años, muchos usuarios la han recordado como la mejor versión. Es más, muchos incluso han tardado años en actualizar a nuevas versiones del sistema, porque sentían que sus equipos rendían peor.
Más tarde llegó Mac OS X Yosemite, y el cambio principal fue hacia un diseño más plano. Ahora, Mac OS X ya no se llama igual, o mejor dicho se escribe del mismo modo. Con idea de ser más homogéneo con el resto de software de Apple, el sistema operativo del Mac ahora se conoce como macOS; y la última versión será la que veremos en otoño: macOS Catalina.
En resumen, otra interesante evolución de un sistema a nivel gráfico. Por supuesto, a nivel de código hay muchas más diferencias, también en temas de aplicaciones incluidas en el sistema. Pero aquí, de lo que se trata es de ver cómo han evolucionado gráficamente. Y recuerda, si quieres ver más capturas, visitar Version Musem es muy recomendable.
Microsoft, 35 años de evolución
En 1985, Microsoft lanzó la primera versión de sus sistema operativo Windows. No era ni por asomo lo que es ahora, pero cómo se usaban ya las ventanas y algunos elementos adicionales resulta curioso. Desde aquel Windows 1.0 hasta la versión 3.0 hubo pocos cambios, y no fue hasta 1995 cuando se produjo uno importante. Windows 95 no sólo fue todo un éxito, también fue el inicio de lo que ahora mismo es el sistema.
Windows 98 fue otra gran versión del sistema, sin embargo, las posteriores todo lo contrario. Windows 2000 y ME pasaron sin pena ni gloria, y muchos usuarios se negaban a instalarlas esperando una futura versión que llegaría con el siguiente gran hito de Redmond: Windows XP.
En 2006 llegó Windows Vista y tres años más tarde Windows 7. El primero, tras un Windows XP que había sido tan bien aceptado, fue un duro golpe para el usuario y, sobre todo, la propia compañía que veía que no era aceptado.
Por suerte, a pesar de lo que mucho que se dijo, Windows 7 y su posterior Windows 8 comenzaron a recuperar la estabilidad y buenas prácticas que han ido evolucionando hasta la actualidad con Windows 10.
Eso sí, el salto al menú de baldosas de Windows 8 fue difícil de asimilar. Es más, aún hay quien no lo ha logrado. Por suerte se puede cambiar a una vista más “clásica”.
Windows 10 es en la actualidad un gran sistema operativo, estable y seguro. Por supuesto, si eres usuario de Mac o Linux te costará adaptarte, al igual que al usuario de Windows cambiar de plataforma. Pero hay que dejar los falsos mitos acerca de la superioridad de uno frente al otro, todas son grandes opciones.
Como puedes ver, la evolución a nivel gráfico es más que notable, pero la estructura apenas se ha modificado. Si quieres ver más imágenes, en este enlace tienes más capturas.
De Mac OS System a macOS Catalina
Hablar de Apple y su sistema operativo de escritorio es hacerlo de dos épocas: Mac OS System y Mac OS X. En la primera, con Mac OS System, Apple logró revolucionar la industria de la informática personal. Un interfaz gráfico, con muchos iconos y donde el uso de tipografías diferentes marcaron un antes y un después.
Aún así, no siempre fue un sistema operativo perfecto. En estas versiones de Mac OS System la multitarea no estaba implementada. Cuando cambiabas de aplicación, la anterior se bloqueaba hasta volvías a ella. Aunque lo más llamativo es que, por mucho que dijeran que los Mac no se colgaban, de vez en cuando te encontrabas con algún bloqueo y el ya clásico y hasta entrañable icono de la bomba.
Con Mac OS System 7 llegó el color, y eso fue toda una gran noticia. Las dos siguientes versiones fueron más continuistas y Apple necesitaba desprenderse de lo que estaba lastrando la evolución de su plataforma.
Por ese motivo o gracias a eso, regreso Steve Jobs y llegó Mac OS X. La nueva versión del sistema operativo fue un antes y un después, estaba basado en el trabajo de NeXt y por fin había una base sólida para construir lo que sería su sistema operativo del futuro.
Desde aquella primera versión, conocida como Cheetah, hasta la recién presentada macOS Catalina, la evolución ha sido notable a nivel tecnologías. Pero el núcleo es el mismo, la forma de gestionar las ventanas, contenido… sigue siendo igual.
Por cierto, Finder es una de esas partes de macOS odiada por algunos debido a sus “limitaciones” y amada por otros por cómo de sencillo resulta, una vez te adaptas, manejar todo el sistema de archivos y carpetas.
De entre todas las versiones de la nueva etapa destacaron algunas como Mac OS X Snow Leopard. El salto en estabilidad y rendimiento que ofreció hizo que, durante años, muchos usuarios la han recordado como la mejor versión. Es más, muchos incluso han tardado años en actualizar a nuevas versiones del sistema, porque sentían que sus equipos rendían peor.
Más tarde llegó Mac OS X Yosemite, y el cambio principal fue hacia un diseño más plano. Ahora, Mac OS X ya no se llama igual, o mejor dicho se escribe del mismo modo. Con idea de ser más homogéneo con el resto de software de Apple, el sistema operativo del Mac ahora se conoce como macOS; y la última versión será la que veremos en otoño: macOS Catalina.
En resumen, otra interesante evolución de un sistema a nivel gráfico. Por supuesto, a nivel de código hay muchas más diferencias, también en temas de aplicaciones incluidas en el sistema. Pero aquí, de lo que se trata es de ver cómo han evolucionado gráficamente. Y recuerda, si quieres ver más capturas, visitar Version Musem es muy recomendable.
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